¿Por qué hacer un rebranding puede ser la clave de tu crecimiento?
En un mercado que cambia rápidamente, el rebranding es una herramienta para revitalizar y reposicionar marcas, adecuándolas a las nuevas expectativas y necesidades de su cliente ideal.
Desde ajustes en el logo hasta renovaciones profundas de la imagen y el mensaje, el rebranding no solo cambia el aspecto de tu marca; redefine su esencia. Acá te contamos deberías considerarlo.
¿Qué es el rebranding?
El rebranding, o cambio de identidad de marca, es un proceso mediante el cual una empresa redefine elementos esenciales de su imagen, como el logo, la paleta de colores, la tipografía, los mensajes o incluso el nombre.
Su objetivo es ajustar la percepción de la marca y conectar de manera genuina y relevante con su público. Marcas como Coca-Cola y McDonald's son ejemplos de rebranding exitoso, que se han adaptado a nuevas generaciones y preferencias sin perder su esencia.
7 razones para considerar un rebranding
1- Modernizar una identidad anticuada:
Los gustos y estilos evolucionan rápidamente. Un logo o paleta de colores que funcionaban hace una década puede hoy parecer desactualizado. McDonald's, por ejemplo, ha renovado su imagen varias veces para adaptarse a las tendencias de diseño y a las expectativas de sus clientes, manteniendo así su relevancia en el mercado y reforzando su conexión con el público joven.
2- Diferenciarse en un mercado saturado:
Si el mercado en el que compites está lleno de marcas que lucen y suenan de manera similar, un rebranding puede ayudarte a destacar. Un ejemplo es Dunkin’ (anteriormente Dunkin' Donuts), que en 2019 eliminó "Donuts" de su nombre y actualizó su imagen para reflejar una oferta más amplia, conectando mejor con los consumidores interesados en opciones de comida y bebida rápida, no solo en donuts.
3- Alinear la marca con nuevos valores y audiencias:
Cuando Starbucks comenzó su expansión internacional, realizó ajustes en su logo, eliminando el nombre de la marca para que su símbolo fuese universalmente reconocido. Con esto, logró reflejar una identidad más inclusiva y adaptable, conectando con audiencias en distintos mercados alrededor del mundo.
4- Reflejar una fusión o adquisición significativa:
Las fusiones pueden necesitar un rebranding para unificar las identidades de ambas marcas. Ueno bank, tras su fusión con vision banco, en el proceso unificó su imagen bajo una identidad simple y moderna, asegurando una experiencia de transición cohesiva y clara para los clientes de ambos bancos.
Este rebranding les permitió proyectar confianza y una imagen consolidada en el mercado.
5- Corregir errores del pasado:
Si tu marca ha pasado por una crisis de imagen o tiene una reputación que deseas cambiar, un rebranding puede ayudar. Old Spice, que solía asociarse con un público mayor, rediseñó su estrategia de marca para enfocarse en una audiencia joven, revitalizando la percepción de sus productos y ganando popularidad con un tono humorístico y fresco.
6- Conectar con una nueva generación:
A medida que tus clientes evolucionan, también debe hacerlo tu marca. El gigante de la tecnología Microsoft renovó su logo y adoptó una estética más minimalista para acercarse a un público joven y alinearse con los estándares de diseño de la industria. Este rebranding le permitió rejuvenecer su imagen y posicionarse como una marca relevante para las nuevas generaciones.
7- Ampliar tu oferta de productos o servicios:
Si tu negocio ha crecido y ahora ofrece productos o servicios adicionales, el rebranding puede comunicar claramente esta evolución. Un ejemplo claro es Amazon, que tiene varias divisiones con nombres diferentes, en un movimiento que reflejá su expansión más allá de los productos a varios otros productos y servicios digitales
¿Cómo afecta el rebranding a la percepción pública?
Un rebranding bien ejecutado no solo hace que la marca luzca actualizada, sino que fortalece la conexión emocional con los clientes. Elegir colores estratégicos, una tipografía que comunique el tono adecuado y un mensaje que resuene con las aspiraciones del cliente son elementos de un buen rebranding.
Estudios de neuromarketing muestran que los colores y formas de una marca influyen significativamente en la percepción y fidelidad del cliente; por ejemplo:
1- Azul: Confianza, Seguridad y Profesionalismo
Industria: Finanzas, tecnología, salud y educación.
Ejemplos de Marcas: IBM, Facebook, LinkedIn, y Visa.
2- Rojo: Energía, Urgencia y Pasión
Industria: Alimentación, automotriz, entretenimiento y ventas.
Ejemplos de Marcas: Coca-Cola, Netflix, YouTube y Toyota.
3- Verde: Naturaleza, Salud y Crecimiento
Industria: Bienestar, alimentos orgánicos, sostenibilidad y tecnología ambiental.
Ejemplos de Marcas: Whole Foods, Starbucks, Tropicana y Land Rover.
4- Amarillo: Optimismo, Creatividad y Alegría
Industria: Entretenimiento, productos infantiles, turismo y servicios de atención al cliente.
Ejemplos de Marcas: McDonald's, Snapchat, IKEA y National Geographic.
5- Naranja: Amigabilidad, Innovación y Entusiasmo
Industria: Educación, tecnología, fitness y alimentos.
Ejemplos de Marcas: Fanta, Amazon, Nickelodeon y Harley-Davidson.
6- Negro: Lujo, Exclusividad y Sofisticación
Industria: Moda, automotriz de lujo, tecnología avanzada y bienes raíces de alta gama.
Ejemplos de Marcas: Chanel, Mercedes-Benz, Apple y Gucci.
7- Rosa: Empatía, Diversión y Dulzura
Industria: Belleza, productos femeninos, moda y productos infantiles.
Ejemplos de Marcas: Barbie, Victoria’s Secret, Cosmopolitan y Baskin-Robbins.
8- Morado: Creatividad, Espiritualidad y Lujo
Industria: Cosmética, moda, educación y productos de bienestar.
Ejemplos de Marcas: Cadbury, Hallmark, Yahoo! y Syfy.
9- Blanco: Pureza, Simplicidad y Minimalismo
Industria: Tecnología, salud, lujo y bienestar.
Ejemplos de Marcas: Apple, Tesla, Adidas y The North Face.
10- Gris: Estabilidad, Neutralidad y Profesionalismo
Industria: Industria automotriz, tecnología y bienes raíces.
Ejemplos de Marcas: Honda, Sony y Swarovski.
Al elegir el color para una identidad de marca, es esencial entender qué sentimientos evoca cada tono y cómo se alinea con los valores y el público objetivo de la marca. De esta forma, el color no solo representa el logo, sino que se convierte en un componente esencial para conectar emocionalmente con los clientes y generar asociaciones memorables.
¿Es hora de tu rebranding?
Si alguno de estos motivos resuena contigo, probablemente sea hora de evaluar un rebranding.
Recordá, una marca sólida y moderna puede abrir nuevas oportunidades, atraer a clientes ideales y diferenciarte de la competencia en un mercado cada vez más exigente.
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